Yakuza of Ina forma parte de una larga saga de películas que trata sobre las aventuras de un yakuza errante llamado Yataro. La historia original es del gran escritor
Kan Shimozawa, creador de la
Saga Zatoichi , o de películas como
Shinsengumi Chronicles (Kenji Misumi, 1963). El personaje de Yataro hizo su primera aparición en algunas de las primeras películas mudas de
Shozo Makino, uno de los padres fundadores del cine japonés, y progenitor de
Masahiro Makino. A lo largo de la saga, Yataro ha sido protagonizado por actores como
Chiezo Kataoka en las películas de
Hiroshi Inagaki de los años 30, o por
Raizo Ichikawa que interpretaría la versión de 1957 del director
Kazuo Mori.
El director
Masahiro Makino es uno de los máximos (de tantos) exponentes que ha dado el cine japonés. Ha ejercido de productor en un centenar de películas, director en cerca de 300 títulos, guionista en más de una veintena; e incluso actor en cerca de 200.
Masahiro era un gran aficionado a los festivales, y normalmente solía plasmarlos en practicamente todas sus películas. Podríamos decir que es el sello característico de Makino añadir a sus películas una mezcla de espadas, festivales, amor y venganza. La película es exáctamente una mezcla de lo mencionado.
Kinnosuke Nakamura había empezado en el cine tan solo 6 años antes de ésta película, y ya contaba con 84 títulos a sus espaldas. En general me ha parecido una gran actuación, aunque en lo que se refiere a las coreografías marciales, está a años luz en el manejo de la espada de actores como
Shintaro Katsu o
Raizo Ichikawa.
En general es una película bastante completa, que condensa perfectamente varios géneros como el jidai-geki, yakuza, drama, comedia, amor, etc... Quizás no sea una obra maestra, pero los incondicionales no deben perdérsela.
Sinopsis:Yataro es un yakuza errante sin destino concreto. Actualmente se hospeda en casa del Jefe Tora, en donde comienza una relación especial con su hija Yuki. La chica está preocupada porque Maki, amante de su padre, está tratando de engañarlo para favorecer al jefe Daihachi. Para solucionar estos entresijos, Yataro pide ayuda al magistrado del distrito, pero tal petición no hará más que provocar el efecto contrario al que buscaba.