Yo creo que el foro ha sido hackeado y sus usuarios sustituidos por robots... ¿Hay algún ser humano al otro lado?
Como bien dice Maedhros, en fín...
Vamos allá. King Hu es el cineasta clásico por excelencia del cine hongkonés... Pensad en una figura del nivel de Akira Kurosawa y tendremos a nuestro hombre... Su carrera empieza, como la de casi todos en aquellos años, en la Shaw Brothers, el mítico estudio, y su primera película para ellos es precisamente esta. Aunque King Hu revolucionó un género tan imprescindible hoy como el wuxia o las películas de espadachines (con su última película para la Shaw, Come drink with me), sus primeras obras no pertenecían a ese género. Así, como Li Han-hsiang (que al parecer, co-dirigió esta película... otro de los grandes realizadores clásicos hongkoneses), empezó en el género más en boga de la época: el musical (vamos, la ópera china). Aunque, precisamente lo menos, al menos en este caso, sean los números cantados...
En fín, una oportunidad única de ver juntos (aunque King Hu también fue ayudante de Li Han-hsiang en The love eterne, otra de las obras importantes del género), a dos monstruos que renovaron el cine hasta límites insospechados (ahí queda el núcleo de la obra de Hu, con películas como Dragon inn o A touch of Zen, monumentales).
Si yo no fuera un robot y me quedara algo de humanidad en las venas, sin duda me acercaría al menos a ella para comprobar que antes de que Zhang Yimou llevara el esteticismo palaciego chino a las pantallas, como unos cuarenta años antes, esta gente ya andaba por ahí jeje .