Cine coreano, años sesenta
 La Edad de Oro del Cine Coreano se establece en los años sesenta. Pues bien, vamos a realizar en primer lugar un breve recorrido para situarnos en el contexto. La televisión por aquel entonces representa un artículo de lujo para la sociedad coreana, e ir al cine suponía el principal medio de entretenimiento. Por otro lado, a la vez que encontramos como propicio caldo de cultivo una afluencia importante de espectadores, también hallamos una constante censura y control por parte del Estado, lo cual supuso un grave perjuicio ya que debido a ello muchas películas fueron prohibidas o sufrieron retrasos.
Una vez ya hemos establecido el contexto, veamos con qué nos encontramos. Pues lo primero que llama la atención es la variedad de contenido, tras ello observamos un gran número de directores con un dominio importante del medio cinematográfico, y eso pese a la censura y dificultades en que se desenvolvían.
Se podría decir sobre Kim Ki-young, Shin Sang-ok, Yoo Hyeon-mok y Lee Man-hee que estos cuatro realizadores representan el máximo exponente de esta Edad de Oro (sin dejar de prestar atención al abundante número de directores y trabajos interesantes de la época). En todo caso muestran un gran talento que se refleja tanto en obras de autor como en películas orientadas al gran público.
El director más original del período es, probablemente, Kim Ki-young. Famoso por sus fuertes melodramas domésticos, cuyas películas psicológicas reflejaban el deseo misántropo y destructivo que vino de la modernización de la sociedad coreana, ello mediante el uso de conjuntos surrealistas y de la iluminación.
 Shin Sang-ok fue otro icono del cine de estos años. Su éxito le permitió incluso abrir su propia productora, Shin Films, llegando a ser una de las más poderosas del país. Así pues logró ganarse el apelativo de «príncipe del cine coreano».
Si mencionamos a Yoo Hyeon-mok, sin duda hablamos de la figura más prominente en Corea referente al cine realista. Es a menudo descrito como el más intelectual de los cineastas de la época dorada.
Y por último Lee Man Hee, apodado el «poeta melancólico», se convirtió en uno de los directores más respetados de la industria. Exhibiendo una cantidad inagotable de inspiración creativa, no importa de qué género fueran las películas, Lee siempre estaba a la búsqueda de nuevas formas con las que renovar el cine.
Selección e introducción: Danyyyy
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